Las formas de la naturaleza cumplen funciones muy importantes. Si observas con atención, todos los huevos, encargados de proteger la vida, son lisos y redondos. Son formas perfectas y fuertes.
1. Pon las mitades de cáscaras de huevo hacia abajo.
2. Pon uno por uno, varios libros encima ¡Las cáscaras, que parecen tan frágiles, no se rompen!
Los huevos son muy fuertes, aguantan el peso de la gallina calentándolos y no pocas veces ruedan de los nidos sin quebrarse. Pero si en este experimento pincharas con un alfiler una de las cascaras, verías que se desmorona. Estas formas perfectas están diseñadas por la naturaleza para proteger la vida, y por eso son sorprendentemente fuertes.