Son pequeños trozos de tela que se sobreponen en la ropa y en general en todo tipo de textiles.
Sirven para dar contraste y realce a los colores y también para parchar rotos o zonas desgastadas de la ropa.
Dos trozos de tela de 35 x 35 centímetros para las tapas, retazos de tela de diferentes colores y motivos para los apliques, aguja e hilo.
1. Tome una de las tapas y cosa los retazos de tela según el diseño que desee.
2. Cosa las dos tapas del cojín a dos centímetros del borde con el revés hacia fuera y deje un espacio de cinco centímetros sin coser.
3. De vuelta a la tela y planche muy bien los bordes.
4. Rellene el cojín y cosa el espacio de cinco centímetros con puntada escondida doblando hacia dentro los bordes de la tela.