Querido padre:
Te escribo esta carta el lunes,
para que recibiéndola el martes,
estés enterado el miércoles,
de que no tendré dinero el jueves,
y que si no me lo mandas el viernes,
tomaré la bicicleta el sábado,
y me veré contigo el domingo.
Tu hijo.
Querido hijo:
A tu carta del lunes,
recibida el martes,
te digo el miércoles,
para que sepas el jueves,
que no tendrás dinero el viernes,
y que si tomas la bicicleta el sábado,
te daré un abrazo el domingo.
Tu padre.