Los terrenos donde se construyen las casas generalmente tienen árboles y se pueden sembrar más con intenciones definidas. Los árboles viven dando vida y viven dos veces. Mientras crecen, sus hojas y sus flores nos alegran, y son la casa de pájaros e insectos, lugar para la variedad de la vida. Nos dan oxígeno para respirar y absorben el CO2 para que la vida siga. Nos dan frutos y nos protegen del sol y de los vientos excesivos.
Cuando mueren, su madera se vuelve la mesa para comer o estudiar, la cama para soñar, la silla para descansar, conversar o pensar; son parte importante de lo que hacemos en nuestras casas. El árbol maduro se cosecha y se aprovecha, pero para que la vida siga para muchos más, hay que sembrar otros en su lugar. Muchos de ellos, los más nobles, duran más que nosotros mismos y posiblemente no los veremos cosechar; aún así, los debemos sembrar, cuidar y proteger, y asegurar la renovación de la vida.
Un ventarrón puede ser fatal si el árbol está muy cerca de la casa o de alguna construcción. Unas raíces extensas y superficiales pueden hacer daños en el terreno y pisos exteriores; es muy importante, a la hora de sembrar árboles, escoger bien los sitios donde sembrar los árboles y tener en cuenta las características de las especies.
Existen diversos tipos de plantas según su función y sus características de crecimiento. Cuando se va a sembrar alrededor de la casa, se debe pensar en el tipo de árbol que se va a plantar según su función. Existen varios tipos:
Los de crecimiento lento, son maderas nobles y valiosas para las futuras generaciones.
Son los propios de cada región. Estos árboles y arbustos protegen los nacederos y las quebradas; además, son la casa de fauna nativa y pájaros, que controlan las plagas de insectos, lo cual es bueno para los cultivos.
Jardín, arbustos y árboles de florescencia o de hojas de colores, que alegran el paisaje y la vida.
Importantes en todas las casas, pues son el complemento de la alimentación. Existen cítricos, como limones y naranjas, variedad de guayabas y aguacates que se dan en casi todos los climas y alturas. Además de diversidad de frutas de cada región.
Plantas o arbustos que dan hojas o frutos que sirven de alimento para los animales. Muchos se usan para los cercos vivos y, también, son protectores de las aguas.