Las muñecas son tan antiguas como la humanidad. Desde los tiempos de las cavernas los niños las han utilizado para jugar. En casa se pueden hacer muchas clases de muñecas. Para hacer una muñeca de trapo, que es la más sencilla de todas, podemos aprovechar pedazos de ropa vieja y recortes de tela, y utilizar rellenos de aserrín, arroz, algodón o espuma.