Los bichos no deseables deben ser controlados, porque pueden ser perjudiciales para la salud o dañinos para la casa, la huerta, o los sembrados. Las formas más efectivas para lograr que no entren a la casa, son el taponamiento de los orificios y el aseo permanente.
Los restos de comida y las humedades en las paredes atraen hormigas, moscas, mosquitos, cucarachas y ratones que contaminan los alimentos y producen enfermedades. Es necesario insistir en la limpieza, el mantenimiento, y el adecuado manejo de las basuras.
Los ratones son roedores muy dañinos, buscan rincones cálidos dentro de la casa o en el solar, y pueden morder a los niños y producir enfermedades. Es preciso combatirlos tan pronto aparecen, pues crecen y se multiplican con mucha rapidez.
Es importante evitar aguas estancadas en pozos, llantas viejas y recipientes al aire libre; el agua se pudre y atrae zancudos e insectos.
Para evitar que los moscos entren a la casa, ponga un limón con clavos de especie o una matera con albahaca en la ventana. Para desviar el camino de las arrieras, ponga pedacitos de una masa hecha con jabón azul y una mata amarga como la verbena o la salvia.
Para ahuyentar las cucarachas cuando vea que empiezan a rondar, ponga varias tapas de frascos con un poco de bórax y azúcar.
Para controlar los ratones, ponga flores de mataratón maceradas con azúcar.