Se conocen como plantas inferiores, porque no tienen sistema vascular, es decir, carecen de tejidos conductores que transporten el agua y otras sustancias a través de la planta; por eso viven en sitios húmedos, en donde hay abundante agua y nutrientes.
Los musgos son plantas muy importantes en el bosque porque tienen una gran capacidad para absorber y retener el agua. Son como una esponja que protege el suelo de la resequedad y la erosión; contribuyen a la formación del suelo, sirven de albergue a muchos animales y embellecen el paisaje.
Son plantas muy diferentes a otras porque no tienen flores ni producen semillas. Los helechos se reproducen por la germinación de las esporas, que son microscópicas y se encuentran en unos sacos que se localizan en el envés (por detrás) de las hojas y parecen pequeños puntos cafés. Hay muchas especies de helechos; su tamaño también varía, los hay de pocos centímetros, otros, en cambio, como el zarro o la palma boba, miden varios metros de altura. Muchos de ellos son plantas pioneras, es decir, que son los primeros en crecer en un rastrojo cuando se empieza a regenerar un bosque. Los helechos tienen nombres vulgares muy curiosos: helecho marranero, helecho gallinero, cuernos, cilantrillos, helecho encaje, garra, entre otros. Hay helechos tan bellos, que se utilizan como plantas ornamentales en casas y jardines.