Que tanto el colador como la imagen de la televisión están hechos de puntos. La red del colador está hecha de puntos huecos y en la televisión la imagen está formada por puntos luminosos llamados pixeles.
Hay coladores que tienen puntos muy pequeños, hay otros que tienen puntos muy grandes, y cada uno sirve para colar cosas distintas. Los puntos huecos de un colador para lavar metales y piedras son más grandes que los de un colador para cernir el dulce de guayaba o el suero. Hay coladores con diminutos puntos, casi invisibles, hechos de tela o papel, que sirven para retener las impurezas del aceite, de la gasolina y del aire de los carros.
La imagen de la televisión está hecha de puntos luminosos y de colores llamados pixeles. A mayor cantidad de puntos es mejor la calidad de la imagen. Lo mismo ocurre con las fotografías. Una cámara como la de los celulares que tenga dos megapixeles tomará fotos formadas con dos millones de puntos. Otra más potente, que tenga siete megapixeles, tomará fotos formadas con siete millones de puntos y por lo tanto la imagen será más nítida, definida y de mayor calidad.
Estas letras que lees, escritas por el computador; la ropa que, curiosamente, es rota, formada por un tejido de hilos que deja minúsculos puntos huecos; las papilas gustativas y la misma piel que tiene millones de poros.
Los tiburones ballena y los tiburones peregrinos nadan con la boca abierta filtrando con sus coladores naturales, hasta 2 mil litros de agua por hora para atrapar el alimento. Es curioso que estos gigantes, que pesan hasta 20 toneladas y llegan a medir 12 metros de largo, coman diminutos alimentos como crustáceos y algas.