Uvadel Suárez nació en Tuchín, Córdoba. A los siete años, sus abuelos le enseñaron a hacer sombreros con la caña flecha. Pero Uvadel tenía espíritu de caminante y se fue a andar por todo el Caribe: recorrió la Guajira, abrió potreros en Bolívar, recogió arroz en Cáceres y fue algodonero en el Magdalena.
En 1981, echó raíces en San Pedro de Urabá, se casó́, formó familia y recuperó lo más precioso que tenía: el arte de hacer los sombreros que le habían enseñado sus abuelos. Sembró en su terreno todo lo que necesitaba, la caña flecha para la materia prima y las plantas de vije y batatilla para teñir los sombreros de quince, diecinueve y veintiún hebras que él hace, y las aretas, los bolsos y las manillas que ahora hacen sus hijos.
Uvadel vive de vender sus artesanías, y cuando le falta algo, intercambia lo que tiene con sus vecinos.
Por haber conservado y enriquecido lo que aprendió, por entender el momento oportuno de andar y de detenerse, por saber cultivar y compartir, se puede decir que el “Indio Sombrerero”, como lo conocen todos en San Pedro de Urabá, ha sabido pararle las cañas a la vida.
Vive de vender artesanías de caña flecha y de lo que cultiva en su terreno. Si algo le hace falta, lo intercambia con sus vecinos.