A los seis meses el niño que está recibiendo sólo leche materna, o a los cuatro meses si recibe otra leche, necesita otro tipo de alimentación además de ésta, que llamaremos alimentación complementaria. La leche materna después de esta edad ya no es suficiente para cubrir todas las necesidades del niño.
Los cereales, las verduras y las frutas son los indicados para iniciar la alimentación complementaria, ya que son muy ricos en carbohidratos, proteínas de origen vegetal, vitaminas, sales y minerales.
El primer paso para iniciar la alimentación complementaria es acostumbrar al bebé a comer con una cuchara. Los primeros alimentos deben prepararse en papillas o puré de consistencia suave o en compotas, utilizando siempre un solo producto a la vez: papilla de avena, compota de banano, puré de zanahoria, por ejemplo.
Las verduras de color amarillo y verde oscuro como la auyama, la zanahoria, la espinaca, la habichuela o la arveja son las preferidas. Éstas se cocinan al vapor con muy poca agua y durante poco tiempo para que conserven las vitaminas. Luego se licuan o se trituran con un tenedor sin poner sal ni condimentos.
Las frutas, como mango, papaya, granadilla, guayaba y banano, se deben dar al momento de prepararlas. Para hacerlo lave bien la fruta, pélela, pártala en pequeños trozos y tritúrela con un tenedor sin agregar azúcar.
Los cereales preferidos son la avena, el arroz y el maíz, los cuales se ofrecen en papillas tibias o frescas según el clima.
La comida del medio día es ideal para iniciar al bebé en los nuevos alimentos, pues a esta hora está más despierto y receptivo. Puede darle primero leche materna, que es la que el niño espera, y luego unas cuantas cucharadas de fruta en papilla o compota. Si el bebé la rechaza no significa que le disguste. A veces la escupe porque no sabe todavía qué hacer con ese tipo de alimento en la boca, por su textura más densa y sólida que la de la leche, o porque no le ha entrado bien y se le dificulta tragarla. El lugar correcto para que el niño pueda tragar sin dificultad es en la parte trasera de la lengua.
* En caso de no tener carne se debe dar una buena cantidad de grano como fríjol, lenteja o garbanzo.