Los signos y síntomas de la rubeola suelen ser difíciles de notar, especialmente en niños. Duran de uno a cinco días y pueden incluir fiebre baja, dolor de cabeza, goteo o congestión nasal, inflamación y enrojecimiento de los ojos, ganglios inflamados en la base del cráneo, la parte trasera del cuello y detrás de las orejas, dolor en las articulaciones (sobre todo en las mujeres jóvenes) y un sarpullido tenue y rosado que comienza en la cara y se disemina rápidamente hacia el torso, los brazos y las piernas, antes de desaparecer siguiendo la misma secuencia.
Tratamiento de los síntomas como fiebre y malestar, además de aislamiento (consulta el artículo Fiebre en los niños). Además, debemos aislar al niño de personas en riesgo, especialmente de mujeres embarazadas.
El sarampión puede ser grave e, incluso, mortal para los niños pequeños; la mortalidad la previene, en gran medida, la vacuna triple viral (consulta el Esquema oficial de vacunación en Colombia hasta los cinco años de edad). Recordemos aislar a las embarazadas de pacientes con sarampión, para evitar problemas en la madre y en el feto.