Esta preparación permite aprovechar restos de comida del día anterior como el arroz o el pan viejo.
Licúe 2 tazas de arroz cocido, 2 huevos, medio pocillo de leche, queso rayado al gusto y una cucharada de mantequilla derretida, hasta formar una mezcla suave.
Luego engrase un molde, vierta allí la mezcla y cocine al baño de María*.