Después de utilizar el agua en la casa, la devolvemos al ambiente y debemos hacerlo de un modo responsable.
Las aguas que salen de la casa se clasifican en dos:
Aguas negras, que son aquellas que salen de los sanitarios con materia fecal y orina.
Aguas grises, que son las que transportan aguas jabonosas del lavadero, lavamanos, lavaplatos y ducha.
Estas aguas se deben tratar antes de devolverlas a la Naturaleza, pues son nocivas para todos los seres vivos. Podemos hacer uso de varias herramientas para que las aguas grises y negras regresen al ambiente de la mejor manera posible, tales como las siguientes:
Es muy importante tratar las aguas jabonosas o grises antes de devolverlas a la Naturaleza por medio de la trampa de grasas, la cual recibe las aguas grises de lavamanos, duchas, cocina, lavaplatos y zonas de ropas.
La trampa de grasas debe tener 1 metro de altura por 60 cm de largo y 60 cm de ancho. Las aguas deben transportarse por tubería de PVC de 4 pulgadas y utilizar un codo que las descargue a 50 cm de altura. Deben salir a través de un conducto en forma de codo que las capte a 15 cm del fondo. Las grasas y las espumas de los jabones tienden a flotar.
Esta trampa se debe limpiar cada seis meses para remover las grasas que quedan allí, las cuales pueden reutilizarse como materia orgánica en el compost.
El pozo séptico es un tanque en el que se descomponen las aguas negras de los sanitarios, con la ayuda de los microorganismos que se encuentran en los excrementos; así se evita que las fuentes de agua se contaminen. Se utiliza en las zonas rurales que carecen de un sistema de alcantarillado.
Para una familia de seis personas, el pozo debe medir 2 metros de largo, 1 de ancho y 1,20 de alto. Este se divide en dos cámaras comunicadas por una ventana de 40 cm, construidas a 40 cm del fondo.
Las aguas negras deben llegar al pozo transportadas por una tubería de PVC de 4 pulgadas y tener una inclinación de 5 cm por cada metro de recorrido. La entrada y la salida se deben hacer a 80 cm de la base.
Los residuos del pozo séptico deben ser limpiados cada 3 o 5 años de uso. Es importante contactar especialistas en esta tarea ya que el pozo contiene gases y bacterias que pueden ser peligrosos para la salud.
A la salida del pozo séptico, lo ideal sería que esta agua pase por un jardín antes de retornarla al ambiente. Este jardín se hace sembrando algunas plantas asociadas a zonas pantanosas y húmedas, como bore, papiros, lirios, platanillos y plataneras. Al final del proceso, las plantas reciben los nutrientes de la descomposición y el agua puede retornar a su ciclo sin contaminantes.