Una mesa y unas sillas crean un espacio de encuentro; una hamaca es un lugar para descansar, soñar y pensar; una estera y cojines invitan a escuchar música; unas mecedoras llaman a la conversación; y una banca invita a mirar y disfrutar el paisaje.
En el corredor se puede dormir, hay risas e historias bien contadas, recuerdos de amigos y seres queridos. Arreglarlo con plantas alegra el ánimo al llegar a la casa.