El piso es la superficie de la casa. Un buen piso debe ser apropiado para caminarlo descalzo, para que los niños gateen y jueguen sin riesgo, para recibir a nivel los muebles de la casa y para lograr mayor aseo en el hogar.
Un piso duro y bien acabado permite que éste se mantenga limpio con facilidad y reduzca la presencia de algunos bichos y olores. Mejorar el piso de la casa, es una opción que transforma el espacio en un lugar agradable y puede mejorar en varios aspectos el bienestar de quienes lo habitan.
Existe gran variedad de acabados para los pisos: baldosa, piedra, concreto, madera, granito, entre otros. Según nuestros gustos y posibilidades, podemos decorar el piso ya sea con baldosas de colores, con figuras y formas diversas, o hacerle un acabado sencillo y natural.
El muro cierra la casa, protege del frío o del calor, de los vientos y de la luz, y nos da privacidad. El muro soporta su peso y el del techo. Existen diferentes materiales para su construcción:
La tapia pisada: es de uso tradicional y emplea la tierra como material para los muros. El proceso de construcción consiste en pisar la tierra y con la presión lograr un muro compacto.
El adobe de tierra: es una forma económica usada en muchas culturas para la construcción de muros. Se fabrica con una mezcla de limos y arcillas seleccionados, sin material orgánico, secados al sol.
Para su durabilidad y belleza, la tapia y el adobe de tierra, que se conocen como “arquitectura en tierra”, se recubren con emboñigado o pañete, alegrados con cal para protegerlos del agua. Estos sistemas bien mantenidos duran siglos.
El bahareque: es también un sistema tradicional que consiste en un enmallado de guadua o madera que forma las paredes, y donde se aplica una mezcla de tierra y cagajón con cemento y arena.
El ladrillo o los bloques de cemento: son materiales con buena resistencia a la carga, duraderos en el tiempo aunque no ayudan a mejorar las condiciones de temperatura, pues dejan pasar el frío o el calor.
La madera, la guadua y la cañabrava: son materiales excelentes con relación al clima. Hay muchos tipos de madera, por ello debe escogerse de acuerdo al uso que se le va a dar. Como la madera es húmeda debemos ponerla a secar, y como es susceptible a las plagas debe ser inmunizada.